viernes, 21 de febrero de 2014

Capítulo 5: El secreto de Marisa

EL PODER DEL DINERO
CAPÍTULO 5: EL SECRETO DE MARISA





 
AL DÍA SIGUIENTE
RANCHO LARSON WEST
INT. MANSIÓN / SALÓN / DÍA
 
Doña Ágata y su hijo Santiago conversan.
 
Santiago: Viniste pronto de Suiza mamá. ¿Qué tal Yamila?
 
Ágata: Bien, perfectamente hijo. Regresé en el primer vuelo a Chicago porque no podía dejar el rancho sólo mucho tiempo, ya sabes que me gusta estar siempre al tanto de todo.
 
Santiago: Deberías tomarte unas vacaciones este verano… ¿No te parece? ¿Qué tal unos días a Venezuela? A tu país.
 

Ágata: Antes muerta que volver allá… nada de eso… mira lo que le pasó a la Mónica Spear.

Santiago: Pues a Europa, París, Viena… Estocolmo te encantaría.
 
Ágata: Ya veremos, Santiago, ya veremos…
 
Santiago: Quería comentarte sobre Eva…
 
Ágata: No me interesa nada que tenga que ver con esa asesina. ¿A saber que tendría con Javier para matarlo? Esa mujer nunca me gustó.
 
Santiago: Mi abogado está intentando sacarla de la cárcel. El juicio será en dos semanas. Paloma también va a ser su defensa.
 
 
INT. MANSIÓN / DORMITORIO DE AMANDA / DÍA
 
Gloria y su tía Amanda conversan sentadas en la cama.
 
Gloria: No me pela, tía Amanda, ni caso me hace.
 
Amanda: Tienes que usar todas tus armas de seducción… todas tus armas de mujer. No puedes ir así como vas siempre tan… recatadita… tan… tapadita. (Burlándose)
 
Gloria: Ay tía, si ya lo he intentado y nada, yo creo que es del otro lado…
 
Amanda: No digas estupideces, por supuesto que no, le conozco bien. Tal vez… no le gustas, simplemente. Es muy tímido también, eh, muy tímido.
 
Gloria: ¿Y entonces?
 
Amanda: ¿Quieres que te ayude con Ángel? ¿En serio lo quieres?
 
Gloria: Claro, por eso vine a pedirte consejo.
 
Amanda: Vas a hacer lo que yo te diga, te voy a ayudar pero nadie se tiene que enterar de esto. ¿Ok?
 
Gloria: OK, te prometo que será un secreto entre las dos. 
 
 
INT. MANSIÓN / DESPACHO DE ÁGATA / DÍA
 
Paloma llega al rancho con intención de hablar con la suegra de su hermana y aclararlo todo. La morena entra en el despacho sin tocar a la puerta.
 
Paloma: ¡Ahora si que vamos a ajustar cuentas usted y yo, desgraciada! (Dando un golpe sobre la mesa con la mano, furiosa)
 
Ágata: ¿Se puede saber que demonios haces tú aquí, maldita naca? ¡A mí no me insultas en mi propia casa!
 
Paloma: Cállese vieja tiranosauria, sé que usted está detrás del asesinato de Javier. ¡Usted trata de inculpar a mi hermana, maldita bruja!
 
La villana se levanta de la silla y se acerca a ella, amenazante.
 
Ágata: Haz el favor y te me largas de mi casa ahora mismo, estúpida, si no quieres que llame a los peones para que te echen a patadas. ¿Me oíste? ¡Fuera de mi casa! 
 
Paloma: De aquí no me voy a mover hasta que confiese que usted le tendió una trampa a Eva. Arpía, que es una miserable arpía.
 
Ágata: Voy a demandarte por difamación, Paloma, esto no se queda así. (Agarrando el teléfono del escritorio)
 
Pero Paloma se lo quita y cuelga con rabia, bruscamente.
 
Paloma: ¡De eso nada! Me tiene harta, le ha hecho la vida imposible a mi hermana durante años pero esto se va a acabar. No voy a dejar que se pudra en la cárcel por su culpa y que deje a los niños sin madre.
 
Ágata: Estás completamente loca, loca de remate. ¿Qué estás borracha o que te pasa?
 
Paloma: Estoy perfectamente sobria, doña Ágata. 
 
Ágata: ¿Sabes por qué le pasan estas cosas a tu hermanita? Por… ZO-RRA. (Burlándose)
 
En ese momento Paloma, llena de rabia y de ira contenidas, la agarra por el pelo con fuerza, tirando hasta someter a la villana.
 
Ágata: ¡AHHHHH!!!! ¡Suéltame desgraciada!
 
Paloma: Le juro que como destape la verdad y usted esté involucrada la voy a sacar los ojos, malnacida. (Amenazante)
 
Ágata: ¡Suéltame! (Se suelta de ella) La próxima vez que te atrevas a tocarme te juro que te vas a arrepentir. (Se pone al otro lado del escritorio)
 
Paloma: ¿Qué va a hacer? ¿Me va a amenazar a mí también con una pistola como hizo con Eva? 
 
Ágata: Fuera de mi casa… ¡FUERAAAAAAA!!!!! 
 
En ese momento, Germán que ha escuchado la discusión, entra en el despacho.
 
Ágata: ¡Germán! ¡Germán, hazme el favor y sácame a esta mujerzuela de aquí! ¡Sácala ahora mismo!
 
El villano toma a Paloma de un brazo pero la morena le suelta una sonora bofetada. Germán, furioso, la da un fortísimo puñetazo que la rompe el labio. Escuchamos música incidental.
 
Paloma: ¡AAAHHHH! ¡Desgraciado! ¿Cómo te atreves? Ahhhh (Llevándose la mano a la boca)
 
Germán la agarra en brazos y la saca a la fuerza del despacho. No contento con esto la lleva al salón y trata de abusar de ella en el sofá.
 
Paloma: ¡AAAHHHH!!! ¡Socorroooo!!! ¡Suéltame degenerado, asqueroso, suéltameeee! (Peleando con él en el sofá)
 
Germán: ¡Cállate zorra! Ahora si que vas a saber lo que es bueno. Vas a aprender a respetar a la gente que no es de tu misma clase social, estúpida. (La da una bofetada)
 
Paloma: ¡AHHHHHHH!!!!
 
El villano la besa a la fuerza, metiéndole mano por cada rincón, ella trata de zafarse de él a cachetadas y gritos. Paloma logra escapar, dándole una patada en sus partes.
 
Germán: ¡Aggg! ¡Maldita perra me las pagarás! ¡AGGGG! (Tocándose)
 
 
INT. GRANERO / DÍA
 
Gloria y Ángel beben licor mientras ríen sentados entre la paja del granero.
 
Gloria: Ay Angelito, Angelito… 
 
Ángel: ¿Y tu prima? ¿Cuándo va a volver?
 
Gloria: El año que viene, dicen. Mejor, ya habíamos salido a mal a cuenta de lo de mi mamá.
 
Ángel: ¿Crees que la señora Eva mató realmente a Javier?
 
Gloria: No lo sé ni me importa… la verdad no me interesa. Ahora lo único que me interesa eres tú, papito… (Intenta besarle y meterle mano bajo la camiseta)
 
Ángel: Gloria… esto no está bien… 
 
Gloria: Calla y tómate una más anda, mi amor… (Le da otra cerveza)
 
La astuta Gloria trata de emborrachar a Ángel, y lo está consiguiendo.
 
 
INT. MANSIÓN  / SALÓN / DÍA
 
Ágata y Amanda hablan sobre Gloria.
 
Amanda: Me encanta mi nuevo carro, suegrita, me encanta. Está increíble.
 
Ágata: Que bien que te gustó… “mi reina” (Sonríe falsa)
 
Amanda: La semana que viene Germán y yo nos vamos a Cuba quince días… Ojalá renazca allá la pasión… (Con voz de buscona)
 
Ágata: Ya no me cuentes tu vida íntima, Amanda. ¿Quieres? No me interesa…
 
Amanda: ¿Sabe una cosa? No le quería decir pero… ¿Cómo le cuento esto?
 
Ágata: ¿Contarme qué?
 
Amanda: Gloria, su nieta anda de amores con el hijo de la criada. 
 
Ágata: ¿Quéee? ¿Con el bueno para nada de Ángel?
 
Amanda: Sí, suegrita… es más… Aquí entre nos, acabo de verles entrar en el granero.
 
Ágata: ¡Yo la mato! (Sale enfurecida del salón)
 
Amanda: Jajajaja, así te salga una úlcera y te mueras vieja cretina.
 
 
INT. GRANERO / DÍA
 
Gloria y Ángel están semidesnudos sobre la paja, únicamente tapados con una sábana vieja, cuando doña Ágata les sorprende en tal situación, Amanda aparece tras de ellos.
 
Ágata: ¡Gloria! ¿Se puede saber que significa esto? 
 
Gloria: ¡Abuela! (Asustada)
 
Ángel: Doña Ágata, yo… (Bebido, y medio atontado)
 
Ágata: ¡Cierra la boca sinvergüenza! ¡Que eres un sinvergüenza! (Se acerca y le da una bofetada)
 
Amanda: Se lo dije, doña Agatita… se lo dije….
 
Gloria: ¡Pero bueno! ¿Tú de parte de quién estás? (Enojada)
 
Amanda: Calla y ven conmigo, estúpida… (La saca a la fuerza del granero, la joven va en sujetador y tanga. Amanda la tapa con la sábana)
 
Su abuela recoge la ropa de su nieta mientras sigue discutiendo con Ángel, únicamente en bóxer.
 
Ágata: Eres un cerdo depravado… Mi nieta es menor de edad.
 
Ángel: En nada cumple 18 años, además ella… ella… (Borracho)
 
Ágata: Encima estás bebido… esto es alucinante… Voy a hablar con tu madre y me va a escuchar Marisa, vaya que me va a oír. (Se va indignada)
 
En el granero, Ángel se pone la camiseta, bueno, hace el intento puesto que está tan ebrio que no es capaz de atinar para vestirse de nuevo. El plan de Amanda ha funcionado.
 
 
INT. MANSIÓN / DORMITORIO DE GLORIA / DÍA
 
La rubia cierra la puerta, Gloria, con una bata puesta, habla con ella.
 
Amanda: Escúchame tonta, que eres tonta. Lo hice todo por ti.
 
Gloria: ¡Pues vaya forma de ayudarme! Dijiste que lo emborrachara y me lo llevara a la cama y eso hice, pero jamás imaginé que fueras a delatarme con la abuela.
 
Amanda: ¡Cállate y déjame hablar sonsa! Tu abuela les encontró juntos medio desnudos… ¿Lograste acostarte con él?
 
Gloria: Que más quisiera, se quedó dormido… no hubo forma.
 
Amanda: No importa, debemos hacerle creer a ese muchacho y a la vieja que sí, que lo hicieron. Y es más, te vas a inventar un embarazo.
 
Gloria: ¿Quéee? ¿Te has vuelto loca, tía Amanda?
 
Amanda: ¿Tu lo quieres amarrar no? ¿No querrás que otra te lo quite, verdad?
 
Gloria: Por supuesto que no. Ángel tiene que ser mío.
 
Amanda: ¡Pues ya está bobita! ¡Ahí lo tienes ya en bandeja de plata! Fingirás un embarazo, luego harás como que lo perdiste y punto. 
 
Gloria: ¿Crees que se traguen el cuento?
 
Amanda: Confía en mí… lo harán. (Sonríe con malicia) Ay mi vida, soy tu tía y voy a ayudarte en lo que haga falta mijita. (Pensando: Y que mejor manera de librarme de ti que casándote con un marginal, jajaja)
 
 
INT. MANSIÓN / DESPACHO DE ÁGATA / NOCHE
 
Santiago: ¿Qué dices? ¿Qué Ángel y Gloria…? 
 
Ágata: Esa muchachita nos salió igual o peor golfa que la madre… Habrás he visto… con el hijo de la chacha, revolcándose en el pajar la muy desvergonzada. Pero esto no se queda así… Voy a echar a Ángel y a su madre del rancho. Mañana mismo se largan de mi casa esos dos desagradecidos.
 
Santiago: No puedes hacer eso, déjame hablar primero con ellos y vemos que hacer. Ángel y Gloria son chicos jóvenes, ya sabes como se es a su edad, las hormonas…. No piensan.
 
Ágata: Déjate de hormonas y hormonos ni que ocho cuartos… Ese Angelito que de Ángel no tiene nada, lo único que busca es una millonaria para salir del pozo de barro en el que vive.
 
Santiago: No creo que Ángel sea de esos, mamá… No sé, lo dudo mucho. Es más, a mí me parece un chico muy formal y muy serio.
 
Ágata: Tan serio que menuda borrachera tenía el niño… Mira… por favor… Déjame sola, estoy agotada, que día, por amor de Dios, qué día…
 
Su hijo sale del despacho, molesto y cierra la puerta tras de sí. Doña Ágata se sirve una copa. La vieja saca un cigarro de un paquete de tabaco de la mesa y lo enciende con un mechero. Doña Ágata se pone a fumar con estilo, como una chimenea humana.
 
Ágata: Relax, Ágata, relax… (Relajada fumando)
 
 
INT. MANSIÓN / COCINA / NOCHE
 
Ángel: ¡Y a mí que me importa si la abuela fuma o deja de fumar, mamá! 
 
Marisa: Pero hijo a quién se le ocurre liarse con una nieta de esa mujer. ¿En qué estabas pensando?
 
Ángel: No lo sé, surgió y ya. Lo que hice, hecho está. 
 
Marisa: ¿Pero te has parado a pensar la que se nos puede venir encima? ¿Lo has pensado?
 
En ese momento son interrumpidos por Santiago.
 
Santiago: Ángel, déjame a solas con tu madre, por favor. 
 
Ángel: Está bien, está bien… (Se va, enojado)
 
Santiago: Marisa… Ángel va a tener que irse de esta casa. Mi madre no va a permitir nada entre tu hijo y Gloria.
 
Marisa: Ay Santiago por favor…
 
Santiago: Señor Santiago, Señor Santiago.
 
Marisa: Ahora no me vengas con eso, después de lo que vivimos hace casi 25 años.
 
Santiago: ¡Cállate, nadie puede saber lo nuestro! ¡Nadie! 
 
Marisa: Si yo le contara a Diego la verdad, si le contara que engañabas a su madre conmigo, con una vulgar criada.
 
Santiago: Tú también le eras infiel a tu marido conmigo, no me vengas ahora con moralidades.
 
Marisa: No puedes echar a Ángel del rancho, no puedes. ¡Te lo prohíbo!
 
Santiago: ¿Ah no? ¿Y se puede saber por qué, ah?
 
Marisa: ¡Ángel es tu hijo! ¡Tu hijo! ¡Él y Diego son hermanos!
 
Santiago: ¿Quéee? (Escuchamos música incidental)
 
En ese instante Diego entra en la cocina y lo escucha todo.
 
Diego: ¿Cómo es eso de que Ángel y yo somos hermanos, papá? ¿Me lo puedes explicar? (Enojado)
 
 
INT. MANSIÓN / DORMITORIO DE GLORIA / NOCHE
 
Amanda: Dentro de un mes dirás que estás en estado y listo. El plan habrá funcionado, Gloria.
 
Gloria: Espero que todo salga así de fácil como tú dices. 
 
Amanda: Confía en mí, organizaremos una boda relámpago y todo arreglado. 
 
Gloria: Ay tía, en serio que a mí jamás se me habría ocurrido nada de todo esto. 
 
Amanda: ¿Verdad que no? (Sonríe falsa, y con maldad)
 
 
INT. MANSIÓN / COCINA / NOCHE
 
Marisa: Yo mejor me retiro… (Se va muy nerviosa)
 
Diego: ¡Habla papá! (Enojadísimo)
 
Santiago: Diego, por favor no montes un escándalo, no son horas.
 
Diego: ¡No me importa, que se entere toda la familia! ¡Eres un…! 
 
Santiago: ¡Déjame hablar y cálmate! 
 
Diego: Desgraciado… engañaste a mi mamá… Ángel apenas tiene 5 años menos que yo, en aquel entonces mi mamá aún vivía.
 
Santiago: Diego, por favor… escúchame.
 
Diego: ¡No hay nada que escuchar papá, nada! ¡Eres un adúltero! ¡Un falso, un desgraciado!
 
Santiago: ¡Ya basta, Diego, basta ya!
 
Diego: Miserable… (Se marcha corriendo de la cocina a toda prisa)
 
Santiago: ¡Diego! ¡Diegooo!
 
 
INT. MANSIÓN / DORMITORIO DE DIEGO / NOCHE
 
El chico hace sus maletas sobre la cama, muy enojado, va metiendo la ropa desordenada, de cualquier forma en su equipaje. Justo cuando es interrumpido por Santiago.
 
Santiago: ¿Se puede saber que haces?
 
Diego: ¡Me marcho de nuevo a España, de donde nunca debería haber salido! 
 
Santiago: Déjame explicarte por favor… Marisa, Marisa y yo… sí, es cierto, vivimos un romance hace 25 años pero no es así como tu piensas.
 
Diego: ¿Ah no? 
 
Santiago: En aquella época tu madre y yo estábamos pasando una crisis de pareja muy fuerte. Ella quería tener otro hijo y yo no estaba por la labor. Discutíamos mucho y nos empezamos a distanciar…
 
Diego: Claro y con esa escusa te tiraste a la criada… 
 
Santiago: ¡Está bien, está bien, admito mi culpa! Fue un error, un grave error, pero créeme yo no sabía que Ángel era mi hijo, acabo de enterarme.
 
Diego: Que más da eso ahora… el caso es que lo es.
 
Santiago: Escúchame, no te vayas de nuevo a Sevilla, esta es tu casa… aquí está tu familia.
 
Diego: ¿Qué familia, ni que familia? Si esto es una casa de locos. Tía Eva detenida, mis primos Gloria e Iván casi secuestrados por mi abuela, Yamila en Suiza, mi tío Germán y mi tía Amanda ahora dicen que se van de viaje a Cuba, según están las cosas con Eva. Y tú… (Conteniendo la risa) Mejor me callo.
 
Santiago: Ángel no tiene la culpa de lo que yo y su madre hayamos hecho, Diego. 
 
Diego: ¿Y quién dijo que la tenga? Aquí los únicos culpables son tú y esa zorra de Marisa.
 
Santiago: No la insultes, hijo.
 
Diego: ¿Ah no? ¿Y que es entonces? Se metió con su propio patrón y sabiendo que estaba casado, y casada también estaba ella por cierto. Con el jardinero que en paz descanse.
 
Santiago: Si quieres irte, vete pero no me guardes rencor, por esto no.
 
Diego: Por supuesto que me voy… espero puedas ayudar a tía Eva con el juicio. Despídeme de Paloma.
 
Santiago: Está bien, como quieras… (Sale del cuarto)
 
Ya a solas, Diego rompe a llorar y da un puñetazo en la  puerta, cerrándola de golpe.
 
Diego: Casi 30 años viviendo una mentira, pensando que eras un hombre intachable y mira con lo que me encuentro… (Mirando una foto de su madre en una estantería) Mamá, no sabes cuanto te echo de menos… (Llorando desconsolado)
 
En ese momento, Diego siente como una brisa en el rostro… Es el aliento de su madre, el espíritu de Elisa está en la casa. Nosotros podemos ver el halo de luz en la habitación y la cara de ella sonriente como si fuera la virgen María.
 
 
INT. MANSIÓN / DORMITORIO DE ÁNGEL  / NOCHE
 
Marisa: Esa es toda la verdad, Santiago se enteró de todo hoy a cuenta de lo tuyo con Gloria.
 
Ángel: ¿Pero que es lo que me estás contando, mamá? ¿Cómo así que Diego es mi hermano? Esto tiene que ser una broma…
 
Marisa: Es la verdad, mi niño… no me odies por esto, pero nunca pensé que todo saliera a la luz así de repente. Diego y tú son medio hermanos. Santiago es tu padre, tu verdadero padre.
 
Ángel: No puedo creerlo… (Alucinando)
 
 
AL DÍA SIGUIENTE
EXT. MANSIÓN / JARDINES / DÍA
 
Diego se dispone a marcharse con sus maletas hacia el coche cuando es interceptado por Ángel. Ambos se miran a los ojos sin decir nada, no pueden dar crédito a lo que han descubierto apenas el día anterior.
 
Ángel: Diego… (Triste)
 
Diego: Ángel… (Serio)
 
Ángel: No te vayas, por favor… no por mí. Si quieres me voy yo y ya está, pero no te vayas, esta es tu casa, yo no soy nadie aquí.
 
Diego: No digas eso… (Triste)
 
Ángel: Es la verdad, mi madre es sólo la criada, y tu eres hijo de una señora, de doña Elisa.
 
Diego: No es eso, Ángel. A fin de cuentas, somos hermanos, de padre, pero lo somos.
 
Ángel: Yo tampoco lo sabía, recién me enteré ayer igual que tú.
 
Diego: Ya no sigas, tengo que irme.
 
Ángel: Siempre quise tener un hermano mayor. (Sonríe)
 
Diego: Ángel… (Sonríe)
 
Ángel: Crecí solo, sin hermanos, sin padre… tuve que ver como tú lo tenías todo…
 
Diego: Yo me crié sin madre, Ángel.
 
Ángel: Lo sé…
 
Diego: Pero si eché de menos crecer con alguien, tener alguien en quién confiar, con quién compartir mi infancia, la adolescencia… Y todo eso tu madre nos lo negó.
 
Ángel: Pero podemos recuperar el tiempo perdido, si te quedas.
 
Diego: No… es mejor que no, ya es tarde para empezar de cero. 
 
Ángel: No te vayas… (Triste) ¡No te vayas hermano! (Le da un fuerte abrazo)
 
En ese instante, Diego se enternece y se abraza con él. Ambos son interrumpidos por Gloria, quien muy enojada le reprocha al joven.
 
Gloria: ¡Lo sabía, sabía que eras…! Pero tú Diego, jamás lo hubiera esperado…
 
Ángel: ¡Cállate Gloria! ¡Diego es mi hermano!
 
Gloria: ¿Quéee?
 
 
DÍAS MÁS TARDE
INT. MANSIÓN / SALÓN  / DÍA
 
Santiago: Lo que oyen, Ángel es mi hijo, es hijo mío y de Marisa.
 
Amanda: No puedo creerlo… 
 
Ágata: Lo que faltaba… Gloria y ese naco son primos ahora… esto es de no creer.
 
Germán: Jajajaja, parece un culebrón venezolano.
 
Santiago: Cállate idiota…
 
Ágata: Esto es increíble… ¿Desde cuando lo sabes?
 
Santiago: Hace un par de días, nada más. Marisa nunca me dijo nada. Para mí también fue una sorpresa.
 
Ágata: Dios mío, que va a decir la gente. Un Larson con un hijo bastardo, que vergüenza, nunca hubiera imaginado esto de ti, Santiago, jamás en la vida.
 
Santiago: A partir de ahora Ángel será tratado como uno más de la familia y tendrá cuarto en la planta de arriba como su hermano.
 
Ágata: De eso nada, solo faltaba. Ni hablar.
 
Santiago: Si no lo aceptas, mis hijos y yo nos iremos de esta casa, mamá. Se acabó de hacer lo que tu digas. Se acabó.
 
Ágata: Está bien, está bien… (Enojada) Mmmm… 
 
 
JAMESVILLE
INT. BAR  / DÍA
 
Sentados a una mesa, Diego y Paloma conversan mientras almuerzan.
 
Paloma: ¿Ángel es tu hermano? ¿El hijo de la criada?
 
Diego: Sí… yo tampoco podía creerlo… Tienes que contárselo a mi  tía Eva.
 
Paloma: Lo haré, hoy voy a visitarla, el juicio es en pocos días. Confío que salga libre.
 
Diego: Seguro que sí… (Sonríe)
 
Paloma: Espera… tienes algo en el labio… (Se acerca y le da un beso)
 
Diego: ¿Y esto a que viene ah?
 
Paloma: A qué eres muy noble, sabía que aceptarías a tu hermano a pesar de todo.
 
Diego: Mmmm… (Ambos vuelven besarse)
 
 
CHICAGO, ILLINOIS
INT. BANCO CENTRAL / DÍA
 
Vemos el caminar de una mujer, unos zapatos negros, así como unas piernas bajo una falda negra. La misteriosa mujer entra en el banco. En primer plano descubrimos quién es.


 
Doña Ágata, ataviada con unas oscuras gafas de sol, el cabello recogido, y muy elegantemente vestida se dispone a hablar con la agente comercial de la ventanilla. La villana se toca el collar de perlas del cuello. Y es que Ágata Larson es una de las mujeres más ricas de Estados Unidos.
 
Ágata: Vengo a ver mi caja de seguridad privada. Tengo que guardar unas joyas.
 
Chica: OK, señora, déjeme su cédula de identidad y su pasaporte. Por favor, firme aquí… (Dándole un papel y un bolígrafo) Enseguida un guardia le acompañará al sótano.
 
La vieja villana se quita las gafas con vanidad, soberbia, con clase y mucha altivez. Doña Ágata firma el documento y se vuelve a poner las gafas oscuras. Acto seguido llega al sótano y se queda a solas con su caja de seguridad, sobre una mesita blanca. Ágata abre la caja con una llave del banco. Ya sin gafas de sol, la villana sonríe al ver el contenido.
 
Ágata: Este es mi seguro de vida… las escrituras de las tierras de Elisa. 2000 hectáreas de tierra fértil y productiva. (Sonríe con maldad)
 
 

CONTINUARÁ

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