Capítulo 3: No sin mis hijos

Nota: Las Imágenes de personajes están en este poster inicial para ahorrar trabajo de publicación. A ver que les parece la idea





CAPÍTULO 3: NO SIN MIS HIJOS
 
RANCHO LARSON WEST
INT. MANSIÓN / PASILLO / DÍA
 
Javier se lleva la mano a la boca, alucinando con lo que acaba de escuchar tras la puerta del dormitorio de Amanda. Javi ha oído toda la conversación entre la rubia y su suegra. 
 
Javier: ¡No puede ser! Doña Ágata y Amanda son un par de asesinas. ¡Ellas mataron a la mamá de Diego!
 
El chico escapa del lugar a toda prisa para no ser descubierto.
 
 
INT. MANSIÓN / DORMITORIO DE AMANDA / DÍA
 
Ágata: Si abres la boca te juro que te mato, ¿Me oyes desgraciada? ¡Te mato!
 
Amanda: Jajajaja, ay ay ay, mi querida Ágata… que me da que por primera vez en su vida tiene miedo. Miedo de mi. (Sonríe con malicia)
 
Ágata: Eso es lo que tú te crees estúpida. Antes muerta que temer a una chantajista traidora como tú. No te atrevas a contar nada de esto a nadie porque no respondo de mi, te lo advierto.
 
Amanda: ¿Me está amenazando?
 
Ágata: Tómalo como quieras, mi vida. (Con chulería)
 
Amanda: Por favor no me hagas reír, “abuela”. (tuteándola)
 
Ágata: A mi no me hablas de tú ahora, igualada. ¿Pero quién te crees que eres?
 
Amanda: Te hablo como se me pega la gana, vieja cretina. Aquí la que tiene ahora la sartén por el mango soy yo, así que a callar porque te tengo en mis manos.
 
Ágata: Lo mismo te digo Amandita. Habla y te hundirás conmigo. Tú también planeaste el asesinato de Elisa.
 
Amanda: Por supuesto, querida suegra, por supuesto pero vamos a llegar a un trato.
 
Ágata: No negocio con delincuentes.
 
Amanda: Escúchame bien, vieja arpía, quiero el Ferrari azul que vimos la semana pasada en Chicago.
 
Ágata: ¿Pero te volviste loca o qué te pasa? Ese auto cuesta más de 150.000 dólares. 
 
Amanda: Por eso mismo, mi reina, quiero un carro de lujo y ese es el que me gusta. Ese.
 
Ágata: Ni hablar… eso sí que no. 
 
Amanda: Tú veras, o me compras ese maldito carro o te prometo que acabarás entre rejas.
 
Ágata: ¡Está bien! ¡Está bien Amanda! El carro es tuyo pero no se te ocurra pedir nada más porque no pienso desembolsar ni un dólar más contigo. Que te quede claro.
 
Amanda: Si  tú no le dices nada a Germán sobre lo de Diego, seré una tumba.
 
La rubia sonríe feliz pues ha logrado que su chantaje surta efecto, pero… ¿Por cuánto tiempo?
 
 
INT. MANSIÓN / DORMITORIO DE PALOMA / DÍA
 
La joven, muy enojada se encuentra haciendo su maleta cuando Diego irrumpe en la habitación sin tocar, bruscamente.
 
Diego: ¡Paloma! (Enojado)
 
Paloma: ¡Haz el favor de salir de mi cuarto Diego, no me hagas enfadar más! ¡Largo!
 
Diego: De aquí no me pienso mover hasta que no me digas que hacías espiándome tras la puerta de mi habitación.
 
Paloma: ¿No te quedó claro con la bofetada, verdad? ¿Qué quieres, que te sacuda otra?
 
Diego: ¡Calla ya y respóndeme! 
 
Paloma: Yo no te estaba espiando, idiota. Que eres un idiota. No sé de donde diablos sacas eso.
 
Diego: Alguien estaba tras la puerta y justo voy a abrirla y tú apareces en el pasillo.
 
Paloma: ¡Fue una casualidad! Yo pasaba por allí, te juro que no te vi, ni siquiera sabia que ese era tu cuarto.
 
Diego: Mentirosa… 
 
Paloma: ¿Sabes qué? Piensa lo que te dé la gana. (Sigue haciendo su maleta en la cama)
 
Diego: ¿Se puede saber que estás haciendo?
 
Paloma: ¿No lo ves? Mis maletas, nos vamos mañana a Nueva York.
 
Diego: ¿Qué, por qué tan de repente?
 
Paloma: Mi hermana discutió con tu abuela y yo ya no aguanto un día más aquí tampoco. 
 
Diego: De eso nada, tu no te vas a ir a ninguna parte sin que aclaremos esto. 
 
Se acerca y le cierra la maleta. Ella trata de golpearle pero Diego la sujeta entre sus brazos. Ambos se miran a los ojos, Paloma muy enojada, casi furiosa, y él también molesto pero ya más relajado.
 
Paloma: ¡Suéltame Diego! ¡Que me sueltes!
 
Diego: No me da la gana. 
 
Paloma: O me sueltas o te juro que voy a gritar, grito eh.
 
Diego: Grita lo que te de la gana, pero antes me vas a decir la verdad. ¿Yo te gusto, cierto?
 
Paloma: No se de donde sacas semejante estupidez… por favor. Pero que creído eres. (Sin darle la cara)
 
Diego: ¡Mírame! ¿Te gusto, verdad? Por eso me espiabas.
 
Paloma: Diego por favor… (Nerviosa)


 
 
INT. MANSIÓN / SALÓN / DÍA
 
Eva conversa con su cuñado Santiago.
 
Eva: No insistas Santiago, nos vamos mañana.
 
Santiago: No hagas caso de mi madre, ya sabes como es, Eva.
 
Eva: Esa mujer es peor que una víbora, fue capaz de inventarme un romance con no se quién sólo para poner a mi hija en mi contra.
 
Santiago: No puede ser…
 
Eva: ¡Te digo que es verdad! Ágata es una bruja, siento que sea tu madre pero lo es.
 
Santiago: Hablaré con ella y…
 
Eva: No le digas nada, te lo negará todo. Nos vamos mañana a primera hora y punto. No se hable más. Ah, siento haberte interrumpido con tu novia en el despacho antes.
 
Santiago: Lucía ya no es mi novia, Eva. Terminamos hace dos años.
 
Eva: No me interesa lo que tengas con esa mujer, pero créeme no me gusta para ti.
 
Santiago: ¿Ah no? (Sonríe) ¿Y quién te gustaría para mí ah? 
 
Eva: Quien sea, pero no esa Lucía. Tiene pinta de… de buscona.
 
Santiago: Jajajajaja. 
 
 
INT. MANSIÓN  / DORMITORIO DE PALOMA  / DÍA
 
Diego: Mm… está bien, está bien. (La suelta)
 
Paloma: Déjame sola, tengo que terminar de empacar. Por favor, Diego…
 
Diego: Como quieras… ¿Sabes? Por un momento pensé que eres una chica diferente.
 
Paloma: ¿Diferente en qué? (Extrañada)
 
Diego: En que… bueno da igual, olvídalo. Sigue con lo que estabas haciendo.
 
El chico se dispone a irse pero ella le toma del brazo. Diego se da la vuelta.
 
Paloma: No, ahora me vas a decir. 
 
Diego: Pensé que eras distinta de las demás chicas… no sé… Esa fue la impresión que me diste el primer día.
 
Paloma: No te entiendo, en serio que no.
 
Diego: La mayoría de las chicas solo me quieren por como soy por fuera, ninguna se fija en mi por como soy por dentro. El día que te conocí creía eras una mas pero luego… no sé…
 
Paloma: ¿Qué pasa Diego? (Preocupada)
 
Diego: No importa, ya te dije que lo olvidaras.
 
Paloma: No.
 
Diego: No insistas… es mejor que me vaya. (Se da la vuelta para marcharse)
 
Paloma: Sí me gustas Diego.
 
Diego: ¿Qué? (Volteando de nuevo)
 
Paloma: Que me gustas, pero yo no te estaba espiando, te prometo que no era yo.
 
Diego: Repite eso.
 
Paloma: Que yo no era la que…
 
Diego: No, lo otro…
 
Paloma: Diego… (Avergonzada)
 
Diego: Pero lo nuestro no podría ser…
 
Paloma: ¿No te gusto, verdad? Bueno… no pasa nada. (Triste) Entiendo, seguro no soy tan guapa y tan explosiva como las chicas con las chicas con las que sales.
 
Diego: No es eso… 
 
Paloma: ¿Entonces?
 
Diego: No quiero enamorarme otra vez. Lo siento.
 
Paloma: No te entiendo…
 
Diego: Es cierto que he tenido muchas novias, bueno no novias, “amigas”, pero novia solo tuve una. Cuando era mucho más joven que ahora.
 
Paloma: ¿Y que pasó? ¿Dónde está ella?
 
Diego: Se fue a estudiar a Australia y nunca más la volví a ver. Rompió conmigo el día antes de irse.
 
Paloma: Lo siento…


 
Diego: Es una larga historia, no quiero hablar de ello.
 
Paloma: ¿Por qué dices que las chicas sólo te quieren por el exterior? 
 
Diego: Eso es lo que me demuestran… después se aburren y luego me dejan.
 
Paloma: No se puede negar que eres muy guapo… (Avergonzada) Es normal que muchas chicas se fijen en ti, a pesar que algunas solo quieran pasar el rato, hay mucha desvergonzada.
 
Diego: Pero yo soy algo más que eso, a veces… me he sentido como si fuera un objeto.
 
Paloma: No digas eso… (Triste)
 
Diego: Al principio me gustaba esa vida pero ahora… no sé, eso tampoco me hace feliz del todo. A la hora de la verdad me siento muy sólo.
 
Paloma: Diego… Ven, siéntate. (Se sientan en la cama)
 
Diego: Tengo que irme, Paloma. Tengo que ayudar a mi padre con…
 
Paloma: Antes de que yo me vaya quiero que me prometas algo.
 
Diego: Dime.
 
Paloma: Nunca más pienses eso de ti. Quien de verdad te quiera, lo hará por como eres por dentro, no sólo por como seas por fuera.
 
Diego: Si tu lo dices… Disculpa, ¿Te puedo preguntar una cosa?
 
Paloma: Lo que quieras. (Sonríe dulce)
 
Diego: ¿Nunca te dijeron que eres muy dulce? (Sonríe)
 
Paloma: No, la verdad que no…. Soy muy amarga y altanera. (Se burla) Por algo soy abogada.
 
Diego: Jajajaja, estás loca.
 
Paloma: Jajajaja. Era una broma, hombre.
 
Diego: ¿En serio te vas a ir? Anda quédate unos días mas. Podríamos salir a tomar algo, al cine, a cenar… en plan amigos… 
 
Paloma: No Diego, no puedo. Es mejor que lo dejemos aquí. Seguro un día encontrarás esa chica que buscas, pero esa no soy yo. Ahora sí, vete, seguro te estén esperando.
 
Diego: Bueno… nos vemos más tarde entonces. (Levantándose de la cama)
 
Paloma: Chao Diego… 
 
Mientras el sale del cuarto, Paloma se queda pensativa mirando por la ventana.
 
Paloma: Quién lo diría, en el fondo es muy tierno. Se ve que ha sufrido por amor… Ay Paloma, ya olvídate de Diego, no es para ti. (Se levanta de la cama y sigue con la maleta)
 
 
INT. MANSIÓN  / SALÓN / DÍA
 
Doña Ágata entra en el salón y se encuentra con Eva, Gloria e Iván a punto de salir con las maletas. Diego se ha ofrecido a llevarlas a Chicago en su carro.
 
Ágata: ¿Se puede saber a donde van con todo ese equipaje? 
 
Eva: A Nueva York, nuestro vuelo sale en unas horas.
 
Ágata: De eso nada, tú vete si te da la gana pero Gloria e Iván se quedan. ¿Verdad niños?
 
Gloria: Abuela… yo me quedaría pero…
 
Iván: Y yo también, pero tengo colegio y…
 
Ágata: Acá podrían estudiar también, hay buenos colegios e institutos en Jamesville.
 
Eva: Le he dicho que nos vamos y punto. ¡Paloma! ¡Paloma! (Mirando a las escaleras) ¿Dónde se metió tu tía, Gloria?
 
Gloria: No lo sé… tal vez ya esté en el coche con Diego.
 
Ágata: No se van a ir a Nueva York… (Quitándole la maleta a Gloria)
 
Eva: ¡Pero bueno! (Quitándole la maleta a su suegra)
 
El malvado Germán aparece en el salón.
 
Germán: ¿Se puede saber que ocurre aquí? 
 
Ágata: Eva, que dice que se marchan.
 
Germán: Que se largue y no vuelva…
 
Eva: Mira Germán, no te metas porque te puedes arrepentir.
 
Ágata: ¡He dicho que los niños se quedan! (Agarrando a Iván de la mano lo acerca a ella)
 
Eva: ¡Eso será por encima de mi cadáver!
 
La envalentonada Eva trata de quitarle al niño pero se encuentra con una sonora y fortísima bofetada de su suegra. El sonido es tan fuerte que la deja la marca de los dedos en la cara. Eva se abalanza para sacudirla pero es sujetada por su hija Gloria.
 
Gloria: ¡Mamá, por Dios!
 
Eva: ¡Suéltame, Gloria, suéltame que la mato! (Furiosa)
 
Ágata: Cuéntale a Iván lo que andas haciendo con Héctor, cuéntaselo, descarada.
 
Iván: ¿De que hablas abue?
 
Eva: Nada cariño, no la escuches, es todo mentira… (Preocupada)
 
Ágata: Tú veras o los niños se quedan conmigo o le cuento la verdad a Iván.
 
Eva: No, por favor, Ágata, no lo haga. (Nerviosa)
 
Ágata: Tú decides… Gloria ya lo sabe y no creo que le haya parecido bien.
 
Gloria: Pues no pero…
 
Eva: ¡Gloria! ¿Pero todavía dudas de mí? Por favor…. (Indignada)
 
Germán: Paloma y tú se pueden marchar pero los chicos se quedan en Larson West con la abuela.
 
Iván: Pero yo quiero que mi mamá viva con nosotros.
 
Ágata: Está bien, tu madre se puede quedar… por un tiempo, luego ya veremos.
 
Eva: ¡No pienso quedarme aquí con usted y la bruja de Amanda!
 
Ágata: ¡Cállate! ¡Haz el favor de cerrar el pico de una maldita vez! ¡Adúltera!
 
Iván: ¿Qué es adultera?
 
Eva: Nada hijo, no la hagas caso, tu abuela está loca… No sabe ni lo que dice.
 
Ágata: ¿Ah no? Claro…. No quieres que el niño sepa la clase de madre que tiene. Mira como Gloria se dio cuenta, mira…
 
Eva: ¡Es usted una embustera, pero esto no se va a quedar así, se lo juro! 
 
Ágata: ¡Que te calles! Germán, sube las maletas a sus respectivas habitaciones. 
 
Germán: Está bien, mamá, como tu ordenes.
 
Gloria: Vamos Iván. (Se van y suben por las escaleras junto con Germán)
 
En el salón, suegra y nuera siguen la discusión.
 
Eva: Me he contenido por no montar un escándalo delante de mi hijo pero no pienso quedarme aquí. Usted no me va a quitar a mis hijos.
 
Ágata: Eso ya lo veremos… (Desafiante) 
 
La villana se da la vuelta para irse pero Eva, furiosa y llena de ira, la agarra del cabello con saña como si quisiera arrancárselo de cuajo.
 
Ágata: ¡AAHHHHHHHH!!!!
 
Eva: ¡Usted no se va a ninguna parte, vieja maldita! 
 
Ágata: ¡AAAAAAAAAAGGGGGG!!! ¡Suéltame, desgraciada! ¡AGGGG!
 
Eva: Me las va a pagar, vaya que me las va a pagar doña Ágata.
 
La madre de Iván y Gloria la pega una fortísima bofetada que la cruza la cara. Ágata se la devuelve con más fuerza. Ambas se enzarzan a cachetadas.
 
Ágata: ¡Eres una perdida! ¡Una zorra muerta de hambre! Siempre lo fuiste.
 
Eva: ¡Y usted es el demonio hecho mujer, maldita embustera! ¡Desgraciada, me quiere robar a mis hijos! 
 
Ágata: ¡Haz el favor y vete de mi casa! ¡Lárgate ahora mismo, perra de cuarta! ¡Fuera!
 
Eva: ¡No le voy a dejar que me quite a mis hijos, eso nunca!!! 
 
En ese momento Eva la pega otra bofetada, Ágata la agarra de los pelos, ambas luchan en el salón, nadie se entera de la pelea, pues la casa es muy grande. Suegra y nuera se caen a golpes. La villana empuja a Eva contra la pared, tratando de ahogarla. Eva toma un pequeño jarroncito de cristal y se lo estampa en la cabeza. 
 
Ágata: ¡AAAAAAAAAGGGG!!!!
 
Desde la cocina, Marisa, escucha el jaleo y sale al salón muy asustada. La criada presencia la pelea.
 
Marisa: ¡Ya basta, doña Ágata! ¡Señora Eva! ¡Basta ya!!!! ¡Señor Germán!! ¡Don Santiagooooo!!!  ¡Ay Dios mio!!! 
 
Eva: La voy a matar, no me va a quitar a mis hijos. (Le pega otra bofetada)
 
Ágata: ¡Voy a acabar contigo, naca miserable! Maldita sea cuando se casó Miguel contigo. 
 
Eva: ¡Cállese! ¡Su hijo tampoco la tragaba! 
 
En ese instante la vieja saca una pistola de un mueble del salón y amenaza a Eva.
 
Ágata: No me obligues. ¡Lárgate de mi rancho, ahora! ¡Fuera! 
 
Eva: Esto no se va a quedar así… (Tomando sus maletas se va, muy enojada)
 
Ágata: No la dejes volver a entrar en esta casa, Marisa, si vuelve avisas a los peones para que la saquen a golpes si hace falta.
 
Marisa: ¿Se ha vuelto loca doña Ágata? ¿Pero como se le ocurre apuntarla con una pistola, por Dios? ¡Es su nuera!
 
Ágata: ¡Cállate! (Le pega una bofetada) Nadie te ha pedido tu opinión y mucho cuidado con hablar de esto con nadie si no quieres que te ponga de patitas en la calle. ¡A trabajar!
 
La pobre Marisa se marcha muerta de miedo hacia la cocina. Doña Ágata se coloca la ropa y el cabello. La villana se mira en un espejo y se ve un moretón en la cara. La vieja sonríe…
 
Ágata: Te voy a destruir maldita… ya vas a ver.
 
 
EXT. MANSIÓN / INT. COCHE DE DIEGO / DÍA
 
Diego, al volante, conversa con su tía Eva y con Paloma. La morena va en el asiento de adelante junto a Diego, mientras que su hermana va atrás.
 
Paloma: ¿Pero qué dices? No podemos dejar a los niños aquí con ella.
 
Eva: No nos vamos a Nueva York pero si al pueblo, a un hotel, porque yo no soporto un día más en esta casa. Voy a denunciarla con la policía.
 
Diego: No puedo creer que mi abuela te quiera quitar a mis primos… no puedo creerlo.
 
Eva: Pues créetelo sobrino, Ágata es una bruja pero conmigo no va poder, no va a poder!!!
 
Paloma: Yo me quedo, no pienso dejar a los chicos solos aquí.
 
Eva: Tú te vienes conmigo al pueblo, vamos a la comisaria. Esto es un secuestro.
 
Diego: Tía Eva, tienes que razonar, habla con ella… alguna solución habrá. Quédate en el rancho con ellos a vivir y ya está.
 
Eva: ¡Tu abuela no me puede ni ver, Diego! No nos soportamos. No la aguanto.
 
Diego: Ufff….
 
Paloma: Tienes que ayudarnos Diego, por favor… (Triste y preocupada)
 
Diego: Mi abuela tiene mucho dinero, muchas influencias, si se inventó eso de Héctor y tu hermana… puede incluso inventar lo que sea para quedarse con ellos.
 
Eva: Convéncela, tú eres su nieto favorito y lo sabes. Habla con ella.
 
Paloma: Dudo mucho que Diego logre algo con esa mujer, Eva.
 
Diego: Está bien cuando vuelva al rancho hablaré con ella.
 
Paloma: Por favor, hazlo por mí, por los niños. Ellos necesitan estar con su madre.
 
Diego: Les prometo que lo haré, no se preocupen. (Arrancando el auto)
 
 
INT. MANSIÓN  / DORMITORIO DE GLORIA Y YAMILA  / DÍA
 
Doña Ágata habla con su nieta Gloria y con el pequeño Iván.
 
Ágate: ¡Miren! Miren como me dejó su madre antes de irse. (Tocándose el morado de la cara)
 
Gloria: No puedo creerlo… (Horrorizada)
 
Iván: ¿Estás bien abuelita?
 
Ágata: Creí que me iba a matar, y todo por decir la verdad, cosa que ella niega la muy…
 
Iván: ¿Cuál verdad?
 
Gloria: Mamá tiene un lío con Héctor, Iván.
 
Iván: ¿Quéeee?
 
Ágata: Lo que oyes, yo misma les vi, cariño mio, les vi. Lo juro por la memoria de tu abuelo que está en el cielo, mi amor.
 
Iván: ¡Nooo! (Se pone a llorar)
 
Gloria: No llores Iván.
 
Ágata: Su madre es una falsa, una desvergonzada. A saber si antes de morir vuestro padre ya no andaba con otros por allá…. Esas mujeres no son trigo limpio.
 
Gloria: Voy a hablar con Héctor, me va a escuchar ese desgraciado.
 
Ágata: ¡No, tu no vas a hacer nada, hija! Yo misma voy a hablar con él y le voy a despedir. Hoy mismo le pongo de patitas en la calle. (Se da la vuelta y sonríe con maldad)
 
 
INT. MANSIÓN / DESPACHO DE SANTIAGO / DÍA
 
Santiago: ¿Qué? ¿Cómo que se pelearon?
 
Germán: Así es. Eva es una salvaje, se atrevió a golpear a mamá, casi la mata. 
 
Santiago: Eva jamás sería capaz de algo así sin motivo. Ella me dijo que…
 
Germán: Eva es una zorra, hermanito, una vulgar golfa y encima una mentirosa, seguro te contó lo que quiso y tú le creiste. Anda enredada con el capataz y mamá les  descubrió. 
 
Santiago: No es posible… pero si Miguel acaba de morir hace unos días… (Alucinado)
 
Germán: Menuda fichita nos salió la Evita esa… menuda fichita, Santiago. (Fumándose un puro)
 
 
JAMESVILLE
INT. HOTEL JAMESVILLE / HABITACIÓN / DÍA
 
Paloma y Diego conversan, mientras Eva se da un baño. 
 
Diego: Ya me marcho, Paloma. Dile a mi tía que en cuanto la policía le diga algo, me avise, no quiero que se forme un escándalo en el rancho. Pero dile que lo piense mejor, que no la denuncie… puede ser peor todavía.
 
Paloma: Está bien Diego, gracias por todo. En serio, si no es por ti no sabríamos a quién acudir.
 
Diego: ¿Les gusta el hotel? No es gran cosa pero es el único del pueblo.
 
Paloma: Está muy bien, no te preocupes. 
 
Diego: De nada, es lo menos que podía hacer. (Sonríe)
 
Paloma: ¿Vas a hablar con tu abuela?
 
Diego: Sí, le diré que Eva la va a demandar y trataré de hacerla entrar en razón.
 
Paloma: Ok, cuídate mucho Diego. Espero verte pronto. (Sonríe dulce)
 
Diego: Y yo a ti. (Sonríe y va a darle un beso en la mejilla)
 
Pero en ese momento Diego se muestra algo más atrevido y la besa en los labios, ella no se lo espera y se queda sin palabras.
 
Paloma: ¡Diego! (Avergonzada) 
 
Diego: ¡Perdón, perdón! (Se va a toda prisa)
 
La joven se queda muda pero a la vez ilusionada. Paloma se mira en un espejo y sonríe feliz, muy feliz.
 
 
RANCHO LARSON WEST
INT. MANSIÓN / DORMITORIO DE GLORIA Y YAMILA  / NOCHE
 
Gloria: ¿Qué es eso que fumas? Huele que apesta.
 
Yamila: Marihuana
 
Gloria: ¿Marihuana? (Sorprendida)
 
Yamila: Tchistttt!!!!
 
Gloria: ¿Pero como así que fumas eso? ¿Estás loca?
 
Yamila: Anda, prueba un poquito te sientes divinamente. Te evades.
 
Gloria: Ni hablar… si se entera mi madre me mata.
 
Yamila: Eva no vive ya aquí, fuma, nadie se va a enterar, ahora abro la ventana y listo.
 
Gloria: Mmm. Está bien… a ver… (Yamila le da uno y le prende fuego)
 
 
INT. MANSIÓN  / SALÓN / NOCHE
 
Diego y su primo Iván están sentados en el sofá jugando un videojuego en la pantalla del televisor.
 
Iván: ¡Te volví a ganar Diego!
 
Diego: Jajajaja, eres un diablo, me volviste a matar.
 
Iván: ¡Es que eres un lento! ¡Jajajaja!
 
Diego: Anda a la cama, que se hace tarde y la abuela te va a regañar.
 
Iván: ¿Cómo está mi mami, hablaste con ella? ¿Por qué se fue?
 
Diego: Eva y la abuela no se entienden.
 
Iván: La abue dice que mi mamá anda con Héctor. ¿Es verdad?
 
Diego: Eso no es cierto. ¿Tú que crees? ¿Crees que tu mamá haría eso? ¿Crees que Héctor, que se ha portado tan bien contigo enseñándote los caballos, el rancho, las vacas… sería capaz de algo así?
 
Iván: No… 
 
Diego: ¿Y entonces? (Sonríe) ¡Vamos campeón a la cama! ¡Córrele! 
 
Iván: ¡Hasta mañana Diego! (Le da un tierno abrazo) Te quiero mucho.
 
Diego: Y yo a ti campeón. (Sonríe, abrazando a su primo)
 
 
DÍAS DESPUÉS
RANCHO LARSON WEST
INT. MANSIÓN / DESPACHO DE ÁGATA / DÍA
 
La villana se encuentra revisando unos documentos sentada a su escritorio cuando suena el teléfono de la mesa. Ágata lo toma y…
 
Ágata: ¿Diga? 
 
Javier: Hola abuelita…
 
Ágata: ¿Qué quieres Javier? ¿Qué confiancitas son esas me puedes explicar?
 
Javier: Tenemos que hablar sobre la boda… la espero en mi casa, en el pueblo, en digamos… ¿una hora?
 
Ágata: ¿En una hora? ¿Y por qué no vienes tú al rancho?
 
Javier: Porque tengo el carro averiado… es importante. He reservado un  restaurante para el festejo en… Bueno mejor venga y vamos a verlo juntos. ¿Le parece?
 
Ágata: ¿Quéee? De eso nada, te dije que eso lo hacía yo. Ahora salgo para allá. 
 
En ese momento la sensual Amanda entra en el despacho, cerrando la puerta tras de sí.
 
Amanda: Hola suegrita… (Burlándose)
 
Ágata: Hoy no estoy para aguantar tus estupideces, Amanda. Tengo muchísimo trabajo.
 
Amanda: ¿Qué tal, cómo va mi auto? (Sonríe como un gato de escayola)
 
Ágata: Estoy en ello, no seas impaciente.
 
Amanda: Venía a decirle que… Bueno… si no es molestia, ya que estamos pues… aparte del coche… había pensado en… no sé… unas vacaciones por el Caribe. ¿Usted sabe? 
 
Ágata: ¿Sí, y que más guapa? Un negro para que te abanique… (Con sarcasmo)
 
Amanda: Pues no estaría mal, la verdad… (Con cara libidinosa)
 
Ágata: Mira, o dejas de pedir o te vas arrepentir. Con el coche tienes bastante.
 
Ámanda: No, no, no… Quiero el viajecito…
 
Ágata: Ni hablar…
 
Ambas siguen la conversación…


 
 
INT. MANSIÓN  / SALÓN / DÍA
 
Germán y su sobrino Diego discuten…
 
Diego: ¡Mi abuela tiene que entrar en razón! Eva es su madre y no puede quitarle a los niños.
 
Germán: Tú no te metas en esto, imbécil. No es asunto tuyo.
 
Diego: Sí lo es, Gloria e Iván son mis primos.
 
Germán: ¿Por qué defiendes tanto a esa gente ah? Claro, claaaaroooo, porque te gusta el dulce rico de Palomita, ¿Verdad? No si te entiendo, sobrinito, te entiendo… La chica está más buena que el pan con mantequilla en la mañana… (Se burla)
 
Diego: Cállate… (Enojado)
 
Germán: ¿Qué? ¿Ya te la beneficiaste? ¿Qué tal es en la cama? Apuesto toda una gata en celo… (Se burla) La verdad es que parece una fu…
 
Pero Diego, furioso, le pega un puñetazo que lo tira sobre una mesita de cristal, la cual se rompe en pedazos.
 
Diego: ¡Eres un desgraciado! 
 
Germán: Esta es la segunda vez que me pones un dedo encima pero no va a haber tercera…. Maldito niño de papá. (Se levanta y le avienta un puñetazo a Diego)
 
El chico cae sobre el sofá. Germán le sacude varios golpes, encima de Diego. El joven le agarra del cuello intentando ahorcarle. Ambos se sueltan uno del otro y se ponen de pie.
 
Germán: ¡Por eso las defiendes! ¡Porque te estás revolcando con esa zorrita de Jalisco!
 
Diego: ¡Que te calles! (Le pega otro puñetazo)
 
Tío y sobrino siguen la pelea, a puñetazo limpio en el salón de la casa. En ese momento aparece Santiago, el padre de Diego con una  escopeta y da un tiro al techo.
 
Santiago: ¡BASTA! ¡BASTA YA!
 
 
INT. MANSIÓN / DESPACHO DE ÁGATA / DÍA
 
Ágata: La próxima vez que te atrevas a tocarme no lo cuentas, Amanda, no lo cuentas.
 
Amanda: El viaje, quiero el viaje. (Soberbia)
 
La vieja se marcha… y ya en el pasillo piensa.
 
Ágata: Un viaje si te voy a dar yo a ti, querida, muy pronto lo vas a tener pero al otro mundo, vas a ir derechita al cementerio desgraciada… (Sonríe)
 
 
CONTINUARÁ